Hoy se celebra el Día Internacional de la Enfermería y Fundal, Fundación Latinoamericana, no puede dejar de homenajear a un sector laboral que está sufriendo más en carne propia que ningún otro, la crisis del coronavirus y ese es el de los profesionales sanitarios.
En el Día Internacional de la Enfermería, la comunidad no debería dejar solos a los que están en la primera línea de esta pandemia, junto a otros profesionales de la salud. Ellos no esperan un día específico para hacer la diferencia, porque en verdad la hacen cada día al lado de sus pacientes.
Esta profesión ayuda a salvar vidas y a curar a quienes siguen un proceso de recuperación. Las personas que se dedican a la sanidad deben ser emocionalmente muy fuertes, pues realizando su labor se encontrarán con mil tipos de situaciones.
El trabajo de una enfermera contiene una gran carga psicológica, muchos de nosotros no somos conscientes de la gran labor que realizan y además se exponen muchas veces a sí mismos, con tal de poder salvar vidas ajenas. Esto es algo que, sin duda, les honra profundamente.
No cualquiera puede ser puede trabajar en enfermería, se requiere de fuerza, inteligencia y compasión, cuidar de los enfermos del mundo con pasión y hacer el bien sin importar lo exhausto que pueda estar al final del día.
En circunstancias más normales ya es una profesión de riesgo que requiere paciencia y fortaleza, por ello, el 12 de mayo se celebra el Día internacional de la Enfermería, con ocasión del aniversario del nacimiento de Florence Nightingale, considerada precursora de la enfermería profesional moderna.
En 1860 inauguró su escuela de enfermería del hospital Saint Thomas de Londres, establecimiento que se convirtió también en la primera escuela laica de enfermería en todo el mundo.
Su trabajo inspiró a Henri Dunant, fundador de la Cruz Roja y autor de las propuestas humanitarias adoptadas por la Convención de Ginebra.
Con sus aportes, Florence Nightingale marcó el camino a seguir por el personal de salud, teniendo como misión que las enfermeras estuvieran capacitadas para desarrollar su vocación en hospitales y trabajar con los más necesitados, así como también cuidar a los pacientes en sus domicilios.